Con el orgullo tapatío en lo más alto, Guadalajara enfrentará la próxima semana al América en una edición más del Clásico del futbol mexicano. Chivas se impuso con autoridad al Atlas en la cancha del Jalisco.

El cuadro rojiblanco afiló su puntería para que el sábado no haya pretexto y puedan vengar la eliminación que le propinaron las Águilas en la última Liguilla y recordarles a los azulcremas la pesadilla que vivieron en el torneo regular del Apertura 2016.

Cada que el Rebaño Sagrado visita el Jalisco se transforma, se impregna de la historia que dejó ahí y saca sus mejores versiones. Con este triunfo los Rojiblancos suman cuatro juegos de manera consecutiva derrotando a los Zorros.

El Guadalajara fue amo y señor del partido, se adueñó de la pelota, puso en aprietos la portería de los Rojinegros en varias ocasiones y se llevó una victoria que le sirve demasiado para trabajar con calma la semana de Clásico Nacional.

El cansancio de Alan Pulido por tantos partidos obligó a Matías Almeyda a ocupar a Ángel Zaldívar como centro delantero y dejarle la banda por izquierda a Isaac Brizuela, lo que ocasionó que Chivas fuera más peligroso en ataque.

Atlas fue de menos a más, pudieron ponerse arriba en el marcador, pero Rodolfo Cota les negó la oportunidad con un atajadón. Los errores fueron matando a los Rojinegros, primero José Madueña cometió un penal sobre Brizuela que cobró de gran manera Ángel Zaldívar, para hacer estallar el Jalisco.

La confianza se apoderó de cada jugador de ojiblanco y la desconfianza de los Rojinegros que antes de que terminara el segundo tiempo vieron caer su meta por segunda ocasión gracias a un error que tuvieron en la salida y que aprovechó Orbelín Pineda para mandar el balón a las redes.

El complemento fue de mero trámite, el equipo del Pelado Almeyda ya con los tres puntos en la bolsa y con el orgullo intacto bajó las revoluciones pensando en lo que será el juego contra las Águilas y eso levantó al Atlas que recortó distancias sobre el final gracias al gol de Barragán, pero no le alcanzó para igualar el resultado.