Entre los seguidores cruzazulinos, la falta de fe persiste irremediablemente. Pero hay alguien que todavía cree en La Máquina. Se trata de Miguel Herrera, quien lejos de confiarse afirma: “No lo veo tan malo”.

El director técnico de las Águilas tiene hoy otro Clásico, ahora en semifinales de la Copa, a la que intentará clasificar de cara a la gran final de dicho certamen, y aunque muchos catalogan como víctima irremediable al cuadro celeste, el popular Piojo no se fía ni tantito.

“Es un buen equipo, pero ha tenido lesiones. Primero le pasó a Barrera con su rodilla, después Torrado anduvo lastimado y hasta Castro. Frente a nosotros se lesionó El Chaco, pero tiene plantel para despertar y lo que queremos es que no lo haga contra nosotros”, comparte Herrera.

En conferencia realizada al término de la práctica, en el Nido de Coapa, El Piojo admite que hoy parten como favoritos, “mas no podemos confiarnos”, insiste. “Después de todo, en la Copa andamos parejos y Cruz Azul no es un equipo fácil”.

La victoria, esta noche en la cancha del Estadio Azteca, aseguraría el boleto para la final de la Copa, por lo que Herrera disputaría su primer título como técnico emplumado.

“Aquí, la exigencia es ganarlo”, reconoce el entrenador emplumado. “¿Premio de consuelo, de qué?”, cuestiona, “si estamos peleando en los dos torneos”.

Enseguida, pone especial énfasis en El Chaco Christian Giménez, quien “como dice Hugo [Sánchez], mi amigo, tiene un par de narices, es un tipo diferente y Cruz Azul tiene plantel”, de ahí que Herrera anunció a su mejor oncena para este compromiso, aunque respetará la confianza que le dio a algunos elementos.

Por ejemplo, el ecuatoriano Narciso Mina permanecerá en la titularidad, por lo que descartó a su paisano Christian Benítez. “Mina es el líder goleador en la Copa”, aboga, convencido de su calidad, a pesar de que le concede mínimas posibilidades de jugar en la Liga.

Eso sí, anuncia la salida de Tony López y el ingreso de Raúl Jiménez, autor de los dos goles en el Clásico Nacional contra Chivas. Pero respetará al juvenil portero Hugo González, quien también lo ha hecho bien en el campeonato copero.

La única duda que mantiene Herrera está en la media cancha. De última hora resolverá si alinea a Rubens Sambueza o al paraguayo Osvaldo Martínez. El primero aún acusa malestares físicos y el segundo no ha respondido plenamente a la exigencia milloneta. “Solamente puedo escoger a tres extranjeros y si Mina es el goleador, lo debo respetar. En el caso de Rubens, no lo voy a arriesgar y aunque a Osvaldo le ha faltado enseñar cosas, en cualquier momento se enchufa y lo hace”, dice Miguel, quien también espera recuperar al Hobbit Bermúdez, ausente ayer de Coapa por la demanda que sostiene con su ex esposa.

Pese a todo, la obsesión del Piojo apunta hacia el título de Liga “y el grupo está consciente de eso”.