Christian Horner, director deportivo del equipo Red Bull, no desestima las comparaciones que se hacen del manejo en lluvia de Max Verstappen con aquellas actuaciones de Ayrton Senna o Michael Schumacher, ‘rain masters’ para la cultura Fórmula Uno.

“Bueno, no podemos tener algo mejor que esto. Creo que lo que hemos presenciado fue algo muy especial”, dijo Horner sobre el tercer lugar que logró ‘Mad Max’ en Brasil y conseguir 11 rebases en las últimas 17 vueltas; incluyendo uno sobre Sergio Pérez a dos del final cuando el mexicano era tercero.

“Creo que está a la altura (de actuaciones como las de Senna en Mónaco 1984 o Schumacher en España 1996). Tienes que compararlo con esos grandes momentos. No presencias a menudo una carrera como esta y creo que lo que vimos fue algo realmente único”.

Verstappen no hace mucho dejó el karting, pues su trayecto a la F-1 fue más bien corto: del kartismo a la F3 europea en 2014 y al siguiente año debutó con Toro Rosso y 17 años de edad.

“Creo que simplemente estaba experimentando”, dijo Horner sobre las trazadas que tomaba el joven holandés. “Incluso detrás del coche de seguridad podías verlo buscando diferentes trayectorias donde hubiera más agarre”.

“Todos estos chicos vienen del karting y lo que él hizo se parece mucho más a un planteamiento de karting: yendo por fuera, cortando hacia dentro, tomando el exterior en la curva tres, la trazada de fuera en la recta…”, de esa manera pasó a Nico Rosberg a mitad de carrera y fue segundo durante algunas vueltas.

“No vi a nadie más [haciéndolo] como Max. Todos han tenido la misma trayectoria a través del karting, pero Max estuvo hoy en su propia liga”.

La lluvia sobre el Autódromo Carlos Pace no dio tregua y acabó con muchos en el pelotón: Grosjean, Ericsson, Raikkonen y Massa terminaron contra el muro. Vestappen estuvo a punto cuando experimentó algo de ‘aquaplanning’ en la subida a la recta de pits con acelerador a fondo; el Red Bull se deslizó totalmente de lado con la trompa viendo hacia el muro hasta que Max volvió a tener control del mismo, lo enderezó y continuó.

“Creo que la mayoría necesitaron un cambio de ropa interior”, ironizó Horner sobre el asunto. “Pero, de nuevo, fue extremadamente tranquilo cuando habló por la radio. Parecía tener todo bajo control, a pesar de ese momento, durante toda la tarde”.