Sergio Pérez tendrá sobre él las miradas de más de 100 mil fanáticos que irán a apoyarlo el próximo domingo y que tienen la esperanza de que por primera vez un mexicano se suba al podio en un Gran Premio de México.

Checo será apenas el tercer mexicano que compita en una carrera de Fórmula 1 en nuestro país, en la década de los sesentas lo hicieron Pedro Rodríguez y Moisés Solana, con mejores resultados para el mayor de los hermanos Rodríguez.

Pedro compitió en ocho Grandes Premios de México, de 1963 a 1970, y ha sido quien más cerca ha estado de subirse al podio, pues en 1968 terminó en el cuarto sitio, tras perder el tercer lugar en las últimas vueltas.

También tuvo otros buenos resultados, tres sextos lugares y dos séptimos sitios, además de un par de retiros.

Por su parte, Solana no tuvo grandes resultados, su mejor posición fue un décimo lugar en 1964 y en sus últimas cuatro apariciones se tuvo que retirar. Falleció en 1969, meses antes del Gran Premio de México de ese año.

Los otros tres pilotos mexicanos que han competido en la máxima categoría no presumen participaciones en nuestro país. Ricardo Rodríguez falleció durante las prácticas de la primera edición, mientras que en los años que Héctor Rebaque participó en F1, no hubo ninguna carrera en México.

Por último está Esteban Gutiérrez, quien este año es piloto suplente de Ferrari y no tiene un lugar en la parrilla, pero todo apunta a que el próximo año se convertirá en el cuarto mexicano que corre para su afición, luego de los rumores que colocan en la nueva escudería Haas.

Pasaron siete carrerras de Fórmula 1 en el Autódromo Hermanos Rodríguez y 45 años para que un mexicano volviera a estar sobre el emparrillado y con sus últimos resultados, Checo parece que tiene todo para que por primera vez una bandera mexicana se vea en el podio del renovado circuito y la afición vea recompensado sus 23 años de espera para presenciar el regreso de la Fórmula Uno.