El pasado 24 de febrero, Emanuel Villa celebró su cumpleaños número 30, mismo tiempo que su actual equipo, los Pumas de la UNAM, tienen si ganarle a las Chivas en Guadalajara. El “Tito” aún no nacía cuando el equipo auriazul, con un gol agónico al minuto 89 de Manuel Negrete, consiguió su último triunfo ante el Rebaño Sagrado en la Perla Tapatía el domingo 7 de febrero del lejano 1982.

Pero eso es sólo historia y estadísticas para el delantero argentino, quien aseguró que las tres décadas que tiene el Club Universidad sin ganarle a las Chivas en su casa no deben pesar en la visita que le harán este domingo a la cancha del Estadio Omnilife, donde intentarán por trigesimocuarta ocasión terminar con la paternidad del cuadro rojiblanco.

Paternidad que ha mantenido durante 33 partidos, de los cuales, el equipo jalisciense ha ganado 20 y empatado 13.

“Nada, no puede pesar nada, en Torreón pesaban los tantos años y no pesó nada. El futbol se vive en el presente y no de estadísticas del pasado. Este es un nuevo partido, un nuevo torneo, y no tienen nada que ver con el pasado”, afirmó.

El atacante nacido en la provincia de Santa Fe está consciente del contexto en el que se da el partido ante el equipo rojiblanco. Ellos llegan con una dolorosa derrota de local ante San Luis y la desaprobación de la afición a su nuevo entrenador Mario Carrillo, mientras que las Chivas vienen de conseguir un motivante triunfo de la cancha del León, tercer mejor equipo del torneo Apertura 2012.

Por lo que para él, el juego será una buena revancha para recomponer el camino y ponerle fin a “esa racha de la que tanto se habla”.

“El fin de semana nos jugamos mucho, ellos vienen de ganar el fin de semana, vienen con los ánimos de querer agarrar este envión positivo, y nosotros con el ánimo de revancha”.

El “Tito” reconoce que hay intranquilidad en el plantel felino por el torneo irregular que han tenido en las primeras nueve jornadas, y señala que la situación no cambiará hasta que el equipo encuentre el funcionamiento que los ayude a ganar partidos para despegar en la Tabla General.

“La tranquilidad va a llegar cuando nos vayamos contentos con nuestra actuación, obviamente los resultados son los que mandan, pero sí necesitamos encontrar ese funcionamiento que nos dé tranquilidad”.

El argentino comprende y justifica los reclamos de la afición felina que lleva un año sin poder disfrutar de una Liguilla, y que el pasado domingo antes y después del duelo ante los Reales de San Luis, pidió la salida del “Capello”.

Sin embargo, para Villa no importa quién juegue o quién dirija, lo importante es que el equipo felino juegue bien y eso se vea reflejado en los buenos resultados.

“Toda la gente que paga un boleto tiene derecho a expresarse, este equipo ya viene de un año que no clasifica. Lo que veo es que necesitamos poner lo mejor de nosotros para sacar esto adelante. Acá no importa si juega Cortés, si juega Villa o si dirige Carrillo o el que sea, lo que importa es que Pumas esté bien”, declaró el “Tito”.