No sin tumultos, la Selección de Nueva Zelanda arribó esta noche a la capital mexicana, con menos de 48 horas de anticipación para enfrentar al Tricolor la tarde de este miércoles en el Estadio Azteca por la Ida del Repechaje mundialista.

Los “All Whites” aterrizaron a las 23:05 horas en un vuelo procedente de Los Ángeles, donde se reunieron apenas el sábado anterior para iniciar la preparación de esta serie.

Desde más de una hora antes, integrantes del “staff” del cuadro oceánico estuvieron en la terminal aérea para recibirlos y organizar una llegada  sin declaraciones que no fue del todo pulcra.

Asediado por cámaras y micrófonos, el volante de ascendencia chilena, Marco Rojas, se dijo contento de estar en México y aseguró que el partido será interesante.

Con una sonrisas tímida y sonrojado, el jugador del Stuttgart no pudo continuar  sus declaraciones porque fue rodeado por elementos de seguridad del equipo neozelandés y por policías capitalinos, quienes entre empujones acompañaron al futbolista hasta el autobús ubicado a unos metros.

El transporte fue escoltado por una patrulla y un par de motocicletas de la Secretaría de Seguridad Pública hasta el hotel de concentración, donde el rival del Tri descansará para este miércoles entrenar en el Estadio Azteca, en el que el entrenador Ricki Herbert ofrecerá una conferencia de prensa a aproximadamente las 14:00 horas.

Desde antes de pasar por los filtros de aduana, los “kiwis” fueron recibidos por la Embajadora de Nueva Zelanda en México, Clare Kelly, quien recordó que más allá del resultado, este enfrentamiento servirá para que ambos países fortalezcan sus lazos.

“Creo que es un ejemplo de cómo el deporte puede ayudar a dos países y para Nueva Zelanda es una buena oportunidad para que los mexicanos conozcan más de nuestro país”, expresó.