Santos posee un modelo deportivo que le ha redituado en cuanto ingresos económicos, deportivos y títulos.

Tras una serie de problemas legales en el 2006, cuando Carlos Ahumada era el propietario del equipo lagunero, Grupo Modelo adquirió el control del equipo, dejando a cargo a Alejandro Irarragorri, quien encabezó el proyecto que le dio a los albiverdes la permanencia y a la postre la consecución de dos campeonatos.

Santos se ha caracterizado por saber contratar de manera inteligente, al adquirir futbolistas de calidad a un ‘bajo’ costo que a la postre consiguen revender a otros equipos por una cantidad mayor.

El ejemplo más claro del ‘buen ojo’ que ha tenido Santos, es el de Oribe Peralta, quien con los Guerreros se consolidó como unos de los mejores delanteros del país.

Los laguneros también han sabido elegir en el mercado internacional, ya que jugadores como Matías Vuoso, Christian Benítez y Darwin Quintero dejaron huella en la institución

Tras la compra de la industria cervecera por AB InBev, Grupo Modelo decidió desprenderse de Santos. Sin embargo, Irarragorri adquirió el 100 por ciento de las acciones del club el 8 de agosto del 2013, por lo que comenzó una nueva etapa en el equipo.

Para este Clausura 2015, la directiva albiverde decidió prescindir de algunos referentes para apostarle a la consolidación de jugadores de Fuerzas Básicas, aunado a la contratación de jugadores como Agustín Marchesín y Hernán ‘Pulpito’ González.