Matías Britos apareció en la recta de final del partido, se alzó sobre el corazón del área, y apenas desvió el esférico para vencer a Hugo González, quien minutos antes había sido el héroe de la tarde para la causa azulcrema.

Con un gol por bando, en un duelo lleno de intensidad, las Águilas del América y los Pumas de la UNAM repartieron puntos al interior del Estadio Olímpico, y de paso, garantizaron una Liguilla de dos Clásicos.

El cotejo fue reñido de principio a fin, por momentos intenso en demasía, pero el momento clave de la tarde se dio al 42′, cuando apareció Paul Aguilar para sacudir las redes por primera vez en el encuentro.

Con marca floja, y plena determinación, el lateral azulcrema remató a puerta con la cabeza y venció al Pikolín Palacios; en ese momento se desató el furor para los de Coapa, que ya se hacían con los tres puntos.

Al 69′, Pumas tuvo la oportunidad de igualar, pero Hugo González se plantó sobre la línea, y con total seguridad, detuvo el penalti cobrado por Ismael Sosa, quien no pudo ocultar su dolor tras un fallo casi incomprensible.

Corría el minuto 85; el partido moría, pero llegó el tanto de igualada tras un centro milimétrico de Javier Cortés que fue perfectamente rematado por Britos, atacante que desvió con lo justo para perforar la puerta en un mano a mano con el guardameta.

Los cinco de agregado no sirvieron de mucho, y el duelo culminó como un apretado empate que mantiene la frente en alto para los del Pedregal y que compromete a las Águilas a hacer frente a su más grande rival si desea la corona del C2016.