José Rivas se consagró como la revelación de la campaña al destacarse, contrario a todo pronóstico, sobre otros elementos en su misma posición y al ofrecer actuaciones de primer nivel con los Tigres de la UANL.

El experimentado zaguero se impuso en una categoría que no es exclusiva de novatos ni dejugadores jóvenes; apareció casi de la nada para convertirse en uno de los referentes de su equipo y guiarles al título cobrando de manera excelsa un penalti en la definición del mismo.

La Palmera adquirió un rol protagónico en su club de la mano del Tuca Ferretti, quien le ofreció un puesto en el Tri gracias a su plurifuncionalidad.

Con garra y precisión, Rivas disputó 12 partidos en el certamen y anotó dos goles.