El América presume ser el más grande, el máximo ganador de títulos y con el cetro en la mano, manda el aviso de que va por el bicampeonato del futbol mexicano.

¿Quién será el “guapo” que les quite a las Águilas esa corona que tanto les gusta presumir en el Clausura 2015?

“Hay muy buenos equipos en el futbol mexicano. Hay muchos equipos que tienen chances de ganar el título”, responde el uruguayo Gustavo Matosas, flamante técnico de los azulcrema.

Los de Coapa, esos que suelen gritar a los cuatro vientos su famoso eslogan “Ódiame Más” aseguran que dejarán atrás todo dejo de arrogancia. A su estratega no le parece correcto que su equipo se crea la consigna de que debe arrollar, gustar y golear en la Liga que comienza esta noche.

Poco importa a Matosas que su club sea el vigente campeón y tenga un plantel reforzado con jugadores de la talla de Carlos Darwin Quintero, Darío Benedetto, Cristian Pellerano y Miguel Samudio. Piensa que hay otros contendientes.

“Me parece una idea presuntuosa [ser un equipo arrollador], que puede llegar hasta ser soberbia”, rechaza. “Nunca hablaré de un equipo así. He escuchado que el Madrid de los ‘Galácticos’, que el Barcelona de no sé qué, pero todos los equipos en México son muy parejos”.

América hace casi 30 años que no logra un bicampeonato con técnicos distintos: 1983-84, bajo el mando del chileno Carlos Reinoso, y 1984-85, con el argentino Miguel Ángel ‘Zurdo’ López, aunque Matosas lo logró en el ciclo 2013-14.

Los cuadros regiomontanos son los más “apuntados” para impedir una nueva celebración de los azulcremas.

Tigres, con una nómina que vale 737 millones de pesos (50.3 mdd), y Monterrey, con un costo de nómina de 663.02 millones de pesos (45.1 mdd) superan a las Águilas, cuyo plantel alcanza 630.7 mdp.

Al menos en el terreno del dinero, los norteños son los máximos contendientes a quitarle el título al americanismo.

Mención aparte para el máximo rival de las Águilas. El Guadalajara comienza su lucha con el Puebla, Veracruz y la UdeG por no descender. Será una batalla tensa y ríspida, pues el Rebaño Sagrado se hundió paulatinamente en el abismo de la tabla porcentual y sus refuerzos no ofrecen mayores garantías.

Cruz Azul y Pumas buscan abandonar la mediocridad en la que se han metido en los últimos torneos para dar un salto de calidad y recuperar los bríos de grandeza que presumieron en otros tiempos.

Con el Santos-Veracruz arranca el Clausura 2015, un torneo de 153 partidos y una Liguilla en la que el América busca ceñirse su corona 13 y decirle al futbol mexicano, de nueva cuenta: “Ódiame Más”.