América se quedó con las ganas y a siete minutos de amarrar su boleto a la Liguilla del Clausura 2018, para enfocarse de lleno en el juego de vuelta de las semifinales de la Concachampions el próximo martes.

Cuando las Águilas se saboreaban los tres puntos, Beckeles se encargó de amargarles la fiesta cuando el partido ya agonizaba, y al final terminaron dividiendo puntos en un buen partido que dieron en la cancha del Estadio Victoria.

Fue un duelo intenso, dinámico y entretenido el que brindaron ambas escuadras. Los primeros 45 minutos fueron equilibrados, con opciones en ambos lados, la más clara de los Rayos al minuto 30, cuando Roberto Alvarado reventó el poste de la portería de Agustín Marchesín con un disparo dentro del área.

América ya había puesto a trabajar en un par de ocasiones a Marcelo Barovero. Primero en un tiro de Cecilio Domínguez fuera del área, tras un rebote en un tiro de esquina, y luego en un derechazo que intentó Oribe Peralta que desvió a tiro de esquina el Trapito.

Marche también lució en un cabezazo que intentó colocar Carlos González a segundo poste. El arquero caminó hacia atrás y esperó el momento justo para saltar estirarse y a mano cambiada cambiar el curso del esférico.

Desde el comienzo de los segundos 45 minutos, Necaxa dejó ver una clara mejoría y comenzó a jugar en el campo del cuadro azulcrema. Con un Dieter Villalpando inspirado comenzaron a llegar con peligro sobre la portería rival, pero les costó trabajo superar la barrera defensiva que plantó el equipo capitalino.

Al 60′ cayó el gol del América, y aunque por unos minutos los Rayos se vinieron abajo, con el paso de los minutos volvieron a retomar el dominio, hasta que al minuto 83 encontraron el gol del empate en una pelota parada que no pudo despejar la zaga visitante.

Brayan Beckeles se encontró con el esférico dentro del área y, sin pensarlo, lo prendió con pierna derecha para mandarlo a guardar e igualar el electrónico.

Dos minutos después, Ventura Alvarado, exjugador de las Águilas, tuvo en su poder el gol del triunfo en un contragolpe, sin embargo, no pudo definir ante la presión de la defensa y el grito de gol en el Estadio Victoria se ahogó.

La visita también tuvo su oportunidad para llevarse el triunfo en la recta final del duelo, cuando Renato Ibarra estrelló un tiro libre en uno de los postes de la portería de Barovero, quien no pudo hacer nada más que ver como el balón no entró por centímetros.

La igualada obligó al América, que llegó a 25 unidades, a esperar una semana más para amarrar su pase a la Liguilla, mientras que dejó virtualmente eliminado de la Fiesta Grande al equipo dirigido por Ignacio Ambriz.