Ciudad de México – El sueño de Murder Clown estaba alejado del ring, se encontraba en las duelas de básquetbol, pero un inesperado giro lo llevó a cambiar las canastas por llaves de Lucha Libre.

Cuando Murder estaba en la preparatoria, comenzó a practicar el deporte ráfaga, siempre estuvo involucrado en las competencias colegiales y cuando estaba a punto de realizar una prueba para un equipo universitario, la vida le cambió.

Para tomar mayor condición y hacerlo bien en la prueba, su hermano lo llevó a entrenar Lucha Libre; lo que ninguno imaginaba es que en ese mismo instante se enamoraría del encordado y no lo abandonaría nunca.

La pasión por el cuadrilátero lo atrapó de una manera increíble, su hermano volvió a la escuela, pero él dejó las aulas para llegar a ser luchador profesional.

“Fui con Canek directamente y le dije ‘me dicen que estudie, pero la verdad yo quiero ver si sirvo para esto, si sirvo me dedico de lleno a la lucha, pero sino, me voy y sigo buscando por otro lado”, expresó Clown.

Dos años después de esa plática, en el 2004, comenzó su carrera profesional sobre el ring, en el 2007 llegó a Triple A para formar parte de un nuevo proyecto, un concepto de payasos que la tres veces estelar quería revivir.

El nombre de Payasos no le agradó a Murder y propuso el de Psycho CIrcus, Dorian Roldán estuvo de acuerdo y comenzó su alianza luchística junto a Psycho Clown y Monster Clown, teniendo una aceptación extraordinaria en el gusto del público.

Con este equipo, llegó al campeonato mundial de tercias, pero nada es eterno y tiempo después traicionó al Totalmente Payaso, eso lo alejó del que era su amigo y del cariño del público.

Murder Clown no viene de generaciones de luchadores, todo comenzó gracias a su hermano y el basquetbol, pero se convirtió en un estilo de vida que ve lejano dejar y que espera que pueda seguir cumpliendo sueños que lo llenan de satisfacción, como el campeonato de parejas que ostenta junto a Monster Clown.