En otro capítulo más del que podría ser el último refuerzo del Club América, Mateus Uribe ha dado de qué hablar en las últimas horas, ya que desde el pasado miércoles ha dejado de asistir a los entrenamientos del Atlético Nacional por su anhelo de portar la camiseta de las Águilas.

Una de las razones que se ha podido enterar, es que el volante colombiano está molesto por las formas en las que se ha dado la negociación por el jugador, ya que su deseo es emigrar al extranjero y sabe que las Águilas es una gran oportunidad. Sin embargo, la directiva lo ha cifrado en casi 7 millones de dólares.

La fuente argumentó que el jugador les ha hecho saber a su directiva el interés por salir del club, y sobre todo, si se trata de un equipo como América, club que conoce al enfrentarlos en el Mundial de Clubes 2016. Este viernes la directiva de Atlético ha citado a Mateus a una reunión para así definir lo más conveniente tanto para él como para el club.
Miguel Herrera expresó en conferencia de prensa que sí existe interés por el volante, pero que está en una baraja de opciones, pero fuentes allegadas al club han aceptado que el fichaje está cada vez más cerca de concretarse.

Una de las barreras que tiene la directiva americanista es que en una primera oferta ponían cuatro millones de dólares sobre la mesa del conjunto de los Verdolagas, aunque el Atlético Nacional deseaba una mayor cantidad y América sólo aumentaría a seis millones.
Darwin Quintero ha salido de la negociación, ya que no es del interés del Atlético Nacional y ahora ellos tienen la última palabra sobre el futuro del jugador, pero están sentenciados por la postura rebelde que ha tomado Uribe al no presentarse a entrenar.

Tras la presión que comienza a ejercer el jugador, estos podrían ser días decisivos para él y para las Águilas si pretende hacerse de una vez por todas de los servicios del jugador de 26 años. Pero las nulas ofertas que existen por Darwin podría cerrar la puerta a un nuevo refuerzo, este fin de semana estarán viajando a Estados Unidos.