Jaime García, quien hace un par de meses ganó la Serie Mundial de Grandes Ligas con los Cardenales de San Luis, visitó Cancún, Quintana Roo, para convivir con aficionados y directivos de los Tigres.

García, quien es el primer mexicano en abrir dos juegos de Serie Mundial, mostró gran humildad durante su visita a la directiva de los felinos, tras disfrutar una semana del Caribe Mexicano, al visitar Isla Mujeres, Cancún, Xcaret, así como la zona de playa.

“Estoy muy contento, ha sido una gran responsabilidad, pero han creído en mí, en mi trabajo; y ser campeón mundial es algo que me da mucho orgullo, pero sobre todo, mucho orgullo para México, para mi ciudad, para todos”, comentó el pitcher.

“Al estar en la lomita, en cada uno de los juegos de la final, sabía que no estaba solo, que mi familia estaba conmigo, pero también sabía que todo México estaba al pendiente de mí, y lo tenía que hacer bien, no los defraude, hoy somos campeones del mundo,” agregó.

Jaime confía en mantener el nivel, por lo que espera el llamado de los Cardenales para volver a los entrenamientos. “Estoy consciente de que no puedo relajarme, agradezco a todos los que han creído en mí, desde la organización hasta el manager, mis compañeros, sin olvidar a mi afición”.

Los Tigres le entregaron un jersey al pitcher mexicano, quien convivió con algunos aficionados, a quienes les firmó autógrafos y se tomó varias fotografías.