Fernando Daniel Martínez Estrada, sargento de la Secretaría de Educación Física y Deporte del Ejército mexicano y atleta ganador de la medalla de oro en los 5 mil metros de los Juegos Panamericanos de Lima 2020, fue denunciado en redes sociales por quien fuera su pareja durante tres años y medio. Se trata de Edna Quintanilla, quien lo acusa de duras agresiones, golpes y amenazas.

Por medio de un video en su cuenta de Instagram con duración de casi seis minutos, Edna contó la terrible serie de violencias y maltratos que el deportista le brindó por más de tres años.

“Al principio todo estaba bien, pero al cabo de un mes él empezó a controlarme”, comentó Quintanilla al inicio del mismo.

La historia de la joven comenzó en 2016 cuando ella llegó a la Ciudad de México, y al poco tiempo comenzó a salir con Fernando Daniel. Edna mencionó que al principio de la relación todo funcionó muy bien, pero que al poco tiempo cambió para mal. La joven narró en su video que con tal de mantener todo en paz y en confianza, le dio todas sus contraseñas de celular y redes sociales a Martínez Estrada, pues éste le exigía saber con quien hablaba en todo momento.

Edna normalizó todas las actitudes violentas de su entonces pareja, a tal grado que dejó de hablar con su familia, pero todo cambió cuando las agresiones dejaron de ser psicológicas y llegaron el maltrato físico.

Quintanilla relató que después de una cena en Toluca, Estado de México, hubo una fuerte discusión en el auto.

“Tuvimos una discusión y dentro de un carro me jaló el cabello y me amenazó de muerte. Me dijo: ‘¿Quieres que te mate, perra?”.

Esa primera agresión abrió la puerta a un mundo nuevo de abuso físico y verbal, por lo que Edna recordó en su video un suceso vivido en una fiesta un 15 de septiembre, en donde comenzaron a discutir y el medallista mexicano la amenazó de golpearla, situación que una amiga suya presenció.

“Me decía que todo lo que había hecho era mi culpa porque yo lo había desesperado”. Tras esa frase, el atleta mexicano se escondió para justificar su reprobable conducta hacia su entonces novia.

El 6 de diciembre del 2019, las agresiones se volvieron más fuertes que nunca, ya que la situación pasó de los golpes al sometimiento por medio de llaves de artes marciales mixtas, objeto por el cual la joven casi pierde la vista de un ojo. El 13 de diciembre del mismo año, dieron por finalizada la relación y al día de hoy, Edna Quintanilla sigue con miedo, pero quiere que su terrible experiencia ayude a mujeres envueltas en relaciones tóxicas.

“Yo temo por mi integridad y por la integridad de mi familia. Esta fue una experiencia sumamente traumática para mí y quiero que esto sirva para poder identificar los focos rojos en una relación tóxica”, finalizó.