En el mundo del técnico de la Selección Mexicana hay cosas más importantes que ganar o perder. La misión de José Manuel de la Torre va más allá de un resultado por histórico que sea; lo que él busca es que a este conjunto se le recuerde como un equipo ejemplar, y para lograrlo ve en la disciplina a su más fiel consejera. Ése es el sello que el Chepo quiere darle a su equipo.

“La responsabilidad de estar en Selección Nacional no es cualquier cosa, estamos representando a un país, aquí no distingues o no se distingue la condición religiosa, política, estrato social, condición económica, aquí somos mexicanos.

“La juventud siempre está muy pendiente de cómo lo haces, de qué haces, somos un ejemplo. Para estar acá se necesita tener un respaldo fuerte para que lo puedas transmitir, y eso es muy agradable cuando las cosas te salen bien, y cuando no salen bien tienes esa responsabilidad de darle solución, porque repercute, sobre todo en el estado de ánimo de la gente”, reveló el Chepo, a un mes de cumplir dos años como timonel del Tri.

Para lograrlo, José Manuel tiene en la mano derecha a la disciplina y en la izquierda el convencimiento.

“Sin disciplina no se llega a ningún lado, eso es de lo que estoy muy convencido y eso tengo que agradecérselo a mis papás que desde niño me inculcaron esto y me lo inculcaron con el ejemplo”, señaló.

“Nada más (hay que) seguirlo fomentando. Es algo que no nos cuesta trabajo, que decidimos todos los días, disfrutamos el ser así y es natural”, aseguró.

Tras el incidente previo a la Copa América, no ha habido un brote más de indisciplina, y eso se refleja en el campo cuando un jugador no reclama al árbitro, no pelea con el rival ni finge una falta, también cuando no ha habido expulsiones en los 23 partidos en que ha dirigido.

“Todo lo que se ha dado ha sido en función de la buena comunicación, si tenemos un tropiezo, podemos corregir, debemos estar siempre pendientes de qué podemos aportar para ser más fuertes, no debemos dejar nada a la deriva”, agregó el Chepo, cuya meta fuera de las canchas parece estar cerca de cumplir.

El futbol, en sus venas

“Si te digo cómo comenzó todo esto, te mueres de risa”. Ésa fue la explicación que ofreció el técnico nacional cuando le preguntamos qué o quiénes habían influido en su formación.

 

“Esto es de casa, tuve acceso a cosas muy difíciles, ser vecino de mi tío Javier, vivir en una familia en la que todos jugamos futbol y desde que reunía a mi papá a mi tío Javier a jugar dominó, ahí escuchaba cualquier cantidad de cosas de futbol. El entrar a entrenamientos, conocer a un Campeonísimo, era un acceso al que muy difícilmente alguien podría llegar, así lo viví”, dijo.

Vela no se negó

José Manuel de la Torre aclaró que Carlos Vela no se negó a integrar la Selección. “No es negarse, porque siempre lo han tomado así. En la decisión de poder optar, él prefirió su situación particular de poderse consolidar, pero eso no es negarse, él nunca ha dicho ‘yo no quiero ir’, tomó otra opción de acuerdo a sus circunstancias”, apuntó.

Agenda complicada

La Selección jugará 21 el próximo año. El Chepo espera que antes de la Confederaciones el Tri pueda llegar con la mayor cantidad de puntos en el Hexagonal, para poder administrar mejor a sus jugadores. González Iñárritu confirmó que serán 10 juegos del Hexagonal, y seis mínimo entre la Copa Oro y la Confederaciones, además de otros cinco de preparación.

No deja de soñar

El Chepo sueña con que México hará algo importante en Brasil 2014. “Es obligado soñar. Los sueños son de cada quien, son de adentro. Lo principal es que México tiene que prepararse, al final es para lo que trabajas, para tratar de ganar. Buscamos las formas de acuerdo a los elementos que tenemos”, explicó.