A pesar de los rumores que ayer ligaron a Diego Reyes en el Porto de Portugal, como lo publicó en su portada el mismo diario luso ‘O Jogo”, el defensor de las Águilas reportó este viernes por la mañana con América en la pretemporada en Avándaro y de inmediato hizo trabajo físico de gimnasio bajo las órdenes del entrenador de porteros José Torruco.

Incluso, el presidente deportivo Ricardo Peláez, quien en días pasados ya había indicado que en un futuro próximo a nadie “se le cortarán las alas”, paró de tajo cualquier especulación y en este momento fue claro en decir que el medallista de oro en Londres 2012 permanecerá en el club el siguiente torneo, situación que está “garantizada”.

“Diego Reyes al menos se queda seis meses más en México”, aseguró escuetamente Peláez .

Lo que es innegable es que el zaguero ha llamado la atención de clubes europeos. Tras recibir un permiso especial por parte del técnico Miguel Herrera debido a un problema personal, reportó a la pretemporada después de tres días de que ésta tuvo su inicio, por lo que también detuvo un poco los rumores.

Reyes llegó alrededor de las 8:45 horas, ya cuando la primera sesión de trabajo del día había comenzado; de inmediato saludó a todos sus compañeros, al técnico Miguel Herrera, quien le dio la bienvenida y con un rostro sonriente, el espigado jugador recibió órdenes de hacer trabajo especial en el gimnasio.

Ya por la tarde, en la segunda sesión física del día, que es más intensa, Diego sí trabajó al parejo del equipo, misma situación del ecuatoriano Narciso Mina que se incorporó el pasado jueves a la pretemporada en Avándaro.