La perla es rojiblanca. Gracias a un gol de fantasía por parte de Alexis Vega, el Guadalajara venció a su rival de Ciudad en el Clásico Tapatío para adjudicarse tres puntos que le dan vida a Tomás Boy en el banquillo del Rebaño.

El partido quedó a deber, pues ambas escuadras mostraron un déficit en su nivel futbolístico. A pesar de ello, Chivas se quedó con las mejores acciones, impulsado por el aliento de los ChivaHermanos y la necesidad de sumar de a tres.

Después de 45 minutos de poco y nada, el Chiverio regresó a la carga para la segunda mitad y nuevamente buscó por todos los medios abrir el marcador.

Sin embargo, no fue hasta el minuto 62’, cuándo Alexis Vega, cómo sacado de otro partido, controló el esférico en el carril izquierdo, perfiló de derecha y cruzó el balón por todo el marco rojinegro para vencer a Camilo Vargas y hacer estallar el AKRON.

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Atlas y Chivas intercambiaron golpes en los minutos finales, pero ninguno tuvo la contundencia suficiente para añadir otro estallido a un Clásico tapatío que vivió sus mejores momentos en la recta final.

Con esto, el Rebaño respira y Tomás Boy podrá trabajar con tranquilidad de cara a un mes de septiembre cargado de emociones.