Christian Benítez pasó de héroe a villano. El ecuatoriano dejó ir el empate ante los Xolos de Tijuana de último minuto, luego de que el silbante Mauricio Morales le regaló un pena máxima a las Águilas, pero como si se tratara de una justicia divina, el ecuatoriano echó su remate por encima del arco, para dejar hasta ahí el invicto americanista, luego de caer (0-1) ante los fronterizos.

La lluvia de goles que venía cosechando América cesó. Era cuestión de que se topara ante un equipo sólido, para volver a la realidad azulcrema. Y e que las golizas que propinaron en la última semana, se demostró ante Tijuana que fueron un espejismo.

La primera parte fue de medir fuerzas, siendo ligeramente mejor el conjunto americanista, aunque esta vez la contundencia los abandonó, pues los remates de Christian Benítez y Daniel Montenegro por una u otra razón salían desviados.

Los caninos poco a poco se asentaron en la cancha, evitando ser replegados en su medio campo como sucedió al arranque. Los Xolos esperaban meticulosamente un descuido del rival, para lanzar la mordida que les permitiera poner contra las cuerdas a las Águilas.

Y fue minutos antes del descanso, cuando un rebote a las afueras del área llegó al argentino Cristian Pellerano, quien se llenó de confianza y sacó un derechazo para clarear al meta Hugo González, ante la incredulidad de los pocos asistentes que se dieron cita en el Azteca.

Para el América no había más que volcarse al ataque en busca del empate, pero nunca se imaginaron que Cirilo Saucedo saldría ataviado con el traje de héroe, sacando cualquier disparo, incluso un remate picado de Christian Benítez que tenía etiqueta de gol, pero que un lance extraordinario del meta robó lamentos y elogios por parte de los asistentes.

La rabieta se hizo aún más grandes para los americanistas, luego de que Paul Aguilar se hizo expulsar al fingir una pena máxima, la cual no dudó en sancionar el silbante Mauricio Morales y mandó al zaguero a las regaderas.

Las Águilas sumaron gente en al ataque, y de último minuto, tras un centro para Tony López, se decretó una pena máxima inexistente; así que Chucho Benítez hizo frente a su ‘coco’, lo penaltis, colocó el balón y una vez más se vio superado por la presión y terminó echando su disparo arriba del travesaño, para decretar una victoria histórica para los Xolos, quienes por primera vez ganaron en el Azteca.