“Tigres fue infinitamente superior, era infinitamente superior y lo que hicimos con Correcaminos fue muy meritorio (en la final del 97), ganarles allá fue algo inaudito, pero la realidad de las cosas es que era un equipo muy superior, todos los jugadores en ese momento de Tigres eran seleccionados nacionales de sus países y eso es lo único que te puedo decir”, fue como se expresó el técnico Raúl Arias Rosas, que estuvo presente en el partido de la jornada 6 del Clausura 2013, del Ascenso MX, entre Correcaminos e Irapuato, acompañado por Américo Scatolaro y un grupo de amigos.

El que fuera estratega de Correcaminos concedió una entrevista a Extremo Deportivo, donde platicó sobre temas que lo han rodeado, como lo son el amaño de partidos, y ahora con la investigación realizada por la Europol, donde menciona que se han amañado 680 partidos en el mundo y que varios de ellos se hicieron en América Central (donde ubican a México), el tema de la Final del 97 y el partido entre Atlante y Puebla de los Ángeles de la temporada 87-88, del cual fue señalado por Eduardo Rergis, ponen la lupa al ex técnico del Cienciano de Perú.

“Al final de cuentas, son solo especulaciones y boberías, y afán de protagonismo, eso es lo único que te puedo decir, este futbol mexicano es uno de los más serios, más decentes y si alguien lo quiere empañar que se responsabilice de lo que dice”, comentó un tanto molesto por los cuestionamientos.

Aseguró que solo disfrutaba el partido como espectador y que cuando este dirigiendo se ocuparía de temas futbolísticos en torno a su persona, ya que “ni tiempo de pensar en esas cosas”.

 

Habló sobre los Naranjas y su técnico Joaquín del Olmo.

“Lo veo muy bien (a Correcaminos), creo que con Joaquín tienen futuro, hay que tenerle paciencia, Joaquín es un técnico que ha quedado campeón en esta categoría y va a hacer las cosas bien”, agregó sobre la remodelación del estadio y los recuerdos que le vienen al estar en él, “todo está muy renovado, la cancha esta excelente, se juega en este horario, si me trae muchos recuerdos y veo un estadio muy bonito, que tiene una afición toda color Naranja”.

Mencionó que Correcaminos no debió dejar ir a Nicolás Olivera, ya que le daba un “plus” y para ascender se necesitan jugadores como el uruguayo.

“Yo pienso que “Nico” Olivera le daba un plus, pero este equipo está bien, pero para instancias de competencia importante se necesita ese tipo de jugadores”, sentenció.

Manifestó su deseo de algún día volver a dirigir a los de la UAT, ya que tiene “la espina clavada” con Correcaminos.

“Tengo la espina clavada, así pasa siempre donde uno está y claro que me gustaría regresar a Victoria, tiene un gran estadio, una gran afición, una cancha muy buena aparte aquí me dieron la primera oportunidad de dirigir y también viví una muy buena etapa como jugador”, concluyó.