Más allá de que la Asociación Mexicana de Futbolistas Profesionales (AMFpro) tiene excelentes intenciones, la realidad es que está lejos de resolver los problemas que defiende, para lo cual se necesita un sindicato, aunado a que tampoco existe solidaridad en todos los jugadores, aseguró el abogado David Cohen.

“Me parece que están muy lejos todavía de tener la fuerza necesaria para ser un contrapeso de los directivos de los clubes, sí necesitarían un sindicato”, dijo el experto en derecho laboral.

Cohen, quien defendió al exfutbolista Salvador Carmona en la demanda que interpuso a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) la década anterior, dejó en claro que al ser una asociación civil es imposible que realicen una huelga sin consecuencias, luego de la posibilidad de que se detenga la fecha 17 si no cumplen con su exigencia de terminar con el “pacto de caballeros”.

“Los jugadores pueden ser despedidos porque estarían incumpliendo con sus respectivos contratos, hay que entender que parar la Liga no implica una huelga legalmente declarada, entonces los clubes podrían aplicar las cláusulas de recisión”, apuntó en entrevista con Notimex.

Respecto a negarse a asistir al llamado de la Selección Nacional de México de cara a la Copa del Mundo Rusia 2018, indicó que a algunos elementos en su contrato se les obliga a asistir a esta convocatoria, pero que no es igual en todos los casos.

“No sería lo mismo, porque ellos no tienen un contrato con la selección, algunos jugadores, no todos, tienen en su contrato la obligación de acudir a los llamados de la selección, los que tuvieran algo así, sí pudieran ser despedidos por sus clubes”, aclaró.

Cohen explicó que con un sindicato “podrían empezar la huelga ante la Junta de Conciliación y Arbitraje para que con base en ello los equipos cumplan con las condiciones de trabajo”.

“Para mí esta asociación está en pañales, no reconocida legalmente y los clubes aparentan darle peso para dejar satisfechos a los futbolistas y que estos reclamos aparezcan como que los escuchan, cuando en realidad no es así”.

Consideró que, sin duda, la AMFpro “es un buen inicio, pero no tiene el peso específico para defender a los jugadores y se va a ver porque el ‘pacto de caballeros’ va a seguir pese a lo que digan y tampoco van a parar la Liga, ellos saben sus consecuencias y nadie se va a exponer a ser despedido”.

Desde su perspectiva, la falta de unión en el gremio de futbolistas hace muy complicado que pueda triunfar un objetivo general.

“De entrada deberían organizarse, y me parece que no hay solidaridad suficiente en los jugadores porque no están en igualdad de condiciones”, externó.

Explicó que “hay jugadores que ganan mucho dinero y son muy importantes para sus clubes, que de alguna manera ven satisfechas sus demandas por el peso específico de cada uno de ellos, en este caso los jugadores que son estrellas”,

Los que no tienen tanto peso, agregó, “piden que los clubes les hagan caso, entonces al no haber una equivalencia entre las figuras y los jugadores de clase media, así como los que apenas inician, me parecen que no lo van a lograr”.