Un juzgado de instrucción admitió a trámite una querella por un presunto delito de estafa presentada por un grupo de empresarios españoles contra el agente de la FIFA, Santos Márquez, quien negoció el traspaso del portero Iker Casillas, del Real Madrid al Porto.

Según publica este jueves el periódico Última Hora, el integrante del máximo organismo del futbol habría dejado a los querellantes al margen de la operación de traspaso del arquero español al equipo portugués, sin abonarles la comisión que les correspondía.

El abogado que lleva a cabo el proceso judicial, Jaime Campaner, confirmó que sus clientes realizaron gestiones que culminaron con el fichaje de Casillas, entonces jugador del Real Madrid, al club luso.

Finalmente, Santos Márquez decidió dejar al margen de la operación a la sociedad de inversores españoles y firmó el traspaso bajo el nombre de otra empresa que nunca participó en la operación, según la tesis de los querellantes.