Tony Romo tuvo que abandonar el partido entre los Vaqueros de Dallas y las Águilas de Filadelfia por una lesión en la clavícula y estaría fuera dos meses.

Cuando en quarterback de Dallas se disponía a mandar un pase, el jugador fue interceptado, soltó el balón y un elemento de las Águilas le cayó encima lastimándose la clavícula.

Romo salió del emparrillado rumbo a los vestidores, el jugador le mencionó al doctor que “creo que me rompí la clavícula”.

En el año 2010, Romo se fracturó la misma clavícula en la semana 7 contra los Gigantes de Nueva York.