Desconoció una supuesta extensión de contrato con la Directiva de Tigres, se quedó sin jugar en una Liga profesional cerca de 10 meses, pero Alan Pulido aseguró que eso no significa que esté mal de la cabeza.

Su último partido en la Liga MX fue el 26 de abril de 2014 con Tigres; poco después, comenzó la novela de Alan con el club felino; directivos alegaban contrato hasta junio 2016 y el delantero que su convenio finalizaba a mediados del 2014.

“Mucha gente me cataloga como ‘chiflado’, como fuera de cabeza, agrandado, pero no es nada de eso, simplemente estoy peleando lo mío, mis derechos como jugador, como ser humano también, también estoy peleando un sueño que tengo desde siempre”.

“No jugar fue un golpe duro. Tigres sacó un contrato donde tenía una extensión en un adendum hasta el 2016, la verdad yo no tenía consentimiento de eso, mis abogados se están encargando de eso”, declaró Pulido en entrevista con Medio Tiempo, sin ahondar en el aspecto legal, ya que para esto el autorizado en el tema es su abogado Jaime Castillo.

Al desconocer la supuesta extensión de contrato, Pulido tuvo que entrenarse por separado en Italia, mientras se realizaba un proceso ante la Federación Mexicana de Fútbol, el cual seguiría poco después ante el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo), luego de que el organismo azteca le diera la razón a Tigres.

“La Federación está de testigo que ellos (Tigres) se comprometieron a tratar de negociar algo y al final nunca hubo respuesta de ellos, yo traté de hacer las cosas de la mejor manera. Trabajé muy fuerte estos siete meses que me entrené aparte, hice de todo, mejoré en muchas cosas, velocidad, forma física, me siento mejor que nunca, mi alimentación no era tan buena y ahora como, como un profesional”.

-¿Supiste que Tigres te quiso vender al Santos? “Yo ya estaba en Europa, desconectado con los celulares, el tipo de horario diferente, hasta después supe que según me querían vender a un equipo de México, pero cuando se hizo la junta en la Federación dije que quería cumplir mi sueño de ir a Europa y no ir a otro equipo de México”.

Pulido no tuvo un entrenamiento formal con un equipo durante este lapso, pero asegura que “no hay un retroceso en su carrera”, algo que personas como el técnico de Tigres, Ricardo Ferretti, pudieran pensar, ya que “Tuca” hasta señaló que la preparación de cuatro años que tuvo con Alan, se vino abajo en tan sólo unos meses debido a su novela.

-En redes sociales hay muchos aficionados que te apoyan, ¿qué pasaba por tu mente cuando te expresaban que hacías falta en Tigres?

“Tengo que confesar que veía todos los partidos de Tigres, porque es un equipo que siempre voy a tener conmigo. Me hubiera encantado estar ahí jugando, poder ayudar de la mejor manera, sabía que por momentos me necesitaban, porque los delanteros no estaban marcando goles y yo con unas ganas de querer jugar cada partido”.

El jugador que fuera el dorsal 17 de Tigres, por fin obtuvo el pase provisional por parte de FIFA y debutó el pasado 9 de marzo en la Súper Liga de Grecia con Levadiakós; ahora, se siente tranquilo de poder obtener el fallo final, el cual aún podría tardar mucho tiempo.

“Este proceso puede durar un año, año y medio, 18 meses. Me siento tranquilo, me siento claro que sí con una confianza certera de que mis abogados están haciendo lo mejor de ellos, son personas muy preparadas que saben lo que hacen”, destacó Pulido, quien confirmó lo que su abogado había declarado a Medio Tiempo, que nunca ha tocado el sueldo que Tigres le siguió depositando.