La NFL se sorprendió con el hecho de que el público mexicano, en su mayoría, fanáticos de los Raiders, molestaran con el ya conocido láser de color verde, al QB de los Texans, Brock Osweiler.

Osweiler se preparaba para lanzar un pase durante la serie ofensiva de Houston, cuando la potente luz ‘tocó’, en más de una ocasión, su uniforme, casco, así como una parte de su rostro.

La página oficial de la Liga afirmó que, según información de un comisionado, la seguridad del estadio ya buscaba a la persona que trajera dicho artefacto para sacarlo del inmueble.

Una tarea que será difícil de lograr para las autoridades, pues encontrar de donde proviene el láser sería como buscar un alfiler en un pajar.