Representantes de los jugadores ante el sindicato de la NFL aprobaron mediante su voto la implementación de análisis antidopaje que detecten la hormona del crecimiento humano a partir de la temporada de 2014.

Originalmente, se había acordado realizar las pruebas sobre esta hormona (HGH por sus siglas en inglés) desde 2011, pero los jugadores han manifestado dudas sobre la veracidad científica de los análisis y acerca de cuál sería el proceso para apelar resultados positivos.

Los jugadores aprobaron también una propuesta de la Liga a fin de aumentar significativamente el umbral para dar positivo en las pruebas de marihuana. Algunos jugadores se han quejado de que el margen actual es tan bajo que cualquier persona que haya estado junto a otras que fumaron marihuana podría dar positivo.

Los cambios generales son retroactivos para los jugadores suspendidos con base en las políticas anteriores y para aquellos que están en un proceso de apelación. Entre esos deportistas figurarían el receptor de Cleveland, Josh Gordon, suspendido por toda la temporada, y el receptor de los Broncos, Wes Welker, sancionado por cuatro encuentros.

Sería posible que esos y otros jugadores quedaran sujetos a las nuevas políticas. Sus suspensiones podrían reducirse, aunque no se emitió de inmediato un anuncio más específico al respecto.