Hasta en la derrota Tom Brady demostró ser un deportista ejemplar, pues luego de que le robaran un balón y fuera recuperado por Dereck Barnett en la jugada que definió el triunfo de Eagles sobre New England en el Super Bowl LII, el quarterback no dudo en felicitar al ala defensiva campeón del trofeo Vince Lobardi.

El encuentro entre ambos jugadores se dio en los túneles del US Bank Stadium, cuando Brady y su esposa Gisele Bündchen se disponían a abandonar el inmueble de Minnesota; Barnett se cruzó en su camino y Tom se acercó para estrecharle la mano y darle un par de palmadas en el pecho.

De igual forma, la modelo brasileña llevó a sus hijos donde se encontraban varios jugadores de las Águilas, quienes siguiendo el ejemplo de su padre, aplaudieron su labor en el emparrillado.