Gigantes de Nueva York y Bills de Buffalo arrancan este domingo la pretemporada de la NFL con el tradicional juego del Salón de la Fama.

El encuentro que cumple la edición 52 en su historia (contando el de hoy se han jugado 51 partidos ya que en 2011 el juego se suspendió por el paro laboral) es parte de los acontecimientos que se realizan este fin de semana para conmemorar la inducción de los siete nuevos integrantes que llegaron al recinto de los inmortales.

“Ésta es una de las tradiciones más maravillosas. Una de las más grandes en todos los deportes. En ninguna otra parte los aficionados pueden ver en un mismo lugar a muchos de sus héroes, aquellos que hicieron grande este deporte. Creo que no hay mejor manera de iniciar la temporada 95 de la NFL”, dijo David Baker, presidente del Salón de la Fama.

Dos de los siete jugadores que ayer fueron inducidos tienen conexión con los equipos que hoy juegan. Michael Strahan fue un excelente defensivo de los Gigantes, campeón del Super Bowl XLII, mientras que Andre Reed fue parte de aquellos Bills que llegaron a cuatro Super Bowls consecutivos.

Los neoyorquinos han jugado en dos ocasiones este tipo de partidos con una marca de 1-1. Buffalo, en tres apariciones, tiene el mismo número de derrotas; ante los Cardenales de San Luis en 1974, los Pieles Rojas de Washington en 1989 y los Titanes de Tennessee en 2009.

La gran ausencia de los Bills para este partido y por toda la campaña, es el linebacker de segundo año, Kiko Alonso.

“Nos sentimos muy mal por él, porque trabajó mucho en los primeros campos de entrenamientos. Esperemos que regrese lo más pronto posible y con el nivel que lo mantuvo como uno de los novatos más destacados en 2013”, afirmó Doug Whaley, gerente general de Buffalo.

La pretemporada continuará el próximo jueves con seis partidos programados, destacándose el Seattle contra Denver. Entre viernes y sábado se completa la primera semana.