La afición de Colo Colo se hizo presente en el Estadio Monumental de Santiago de Chile, no para alentar al equipo, ni para presenciar un encuentro, pero para despedir a uno de sus elementos más importantes en la barra del Cacique.

En un acto poco común, los seguidores del cuadro chileno no dudaron en darle ‘el último adiós’ a Gustavo Wilson, un polémico fanático, caracterizado por su historial con la policía, y que según reportes, murió asfixiado.

Fue así como la porra de Colo Colo decidió despedirse de su amigo y compañero, incluso, el ferétro del fallecido se paseó por una sección del Monumental, donde el resto de los aficionados interpretaron las canciones que normalmente le cantan al Cacique, cuando salta al terreno de juego.

Wilson recibió un homenaje póstumo en el inmueble de sus amores, para después ser llevado a un cementario de la localidad, donde fue enterrado.