Recuerdo que cuando México apenas clasificó al Mundial (gracias o no, a EUA), hubo muchos comentarios y críticas hacia los seleccionados que conformaban el equipo que Miguel Herrera comandaría a la Copa del Mundo.

Inició la fiesta del balompié en tierras caipirinhas y me atrevo a decir que casi ninguno le apostaba a México, la mayoría de los pronósticos eran pesimistas.

Siendo sincera fui una de esas que pensó muy dentro que nuestro futbol mexicano no llegaría más allá de la fase de grupos.

Claro que como aficionada y mexicana que soy también tenía la velita prendida y los dedos cruzados de que ocurriera lo inesperado.

Como lo platiqué antes, este Mundial ha sido de muchas sorpresas.

Y es que quién diría que la gran potencia española con todo y sus estrellas, esté fuera desde la segunda jornada.

Quién diría que Argentina con todo y Messi  no tenga el nivel futbolístico que se esperaba.

Quién diría que Brasil, el anfitrión, no sea aquel Brasil lucidor, el del “jogo bonito”.

Quién diría que México dio desde el primer partido ante Camerún un juego donde saboreamos de un excelente fútbol con todos sus ingredientes.

Sorpresa la que nos llevamos cuando vimos a nuestra selección codeándose con la anfitriona, ahí vimos la pasión, el futbol , la garra con la pelota, el tener arriba la mirada sin importar enfrentarse a un rival de renombre, aclaro que de renombre porque de juego, eso también ha sido una sorpresa,  pero sobre todo sentimos el hambre de portería , el hambre de triunfo y un futbol tranquilo, equilibrado, con cabeza fría, un equipo grande, de esos que solo soñábamos y que ahora tenemos la fortuna de apreciar.

Espero con extrema emoción, nerviosismo y expectativa  el partido de México ante Croacia.  Imagino que usted ya tiene hasta lista la playera para portarla con orgullo.

Quién diría que estaríamos disfrutando de un México en estas instancias, a poco de llegar a los octavos de final en el Mundial 2014.

Quién diría que estaríamos igualando al local en puntos y que con un solo empate lograríamos avanzar al siguiente lugar.

Los croatas saben que se juegan su permanencia en Brasil, así que no saldrán a experimentar con México, han analizado bien a nuestros jugadores, han visto detenidamente los videos del funcionamiento de la selección  tricolor y si bien dicen que no es una selección de grandes estrellas sí tienen conciencia de que como equipo ha logrado consolidarse tan fuerte como ellos.

Si bien a Coracia no le fue bien en el partido inaugural ante Brasil, sí vimos un equipo que no se achicó ante un local, que fue víctima del mal arbitraje y otras situaciones.

El segundo partido demostró que tienen para meter goles y que son efectivos y peligrosos en este punto.

No es un duelo fácil, pues tanto los croatas como nuestros mexicanos se juegan su estadía en Brasil.

Pero qué bonito va ser ver a estas dos escuadras en acción jugándolo todo por el todo.

Usted y yo contagiemos de nuestros deseos de triunfo a esta selección que nos ha llenado de sorpresas. Este partido es imperdible, promete mucho y se juega por vivir.

México va a sorprender. ¿Quién diría?

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