Cuando alguien se propone un objetivo con una directriz firme sin salirse de la ruta no debe sino existir como conclusión: el triunfo inherente al éxito de llegar a dicha meta; lo anterior apreciable lector lo dedico a los “Xolos” Tijuana, equipo que llegó a la final del fútbol mexicano con tan sólo unos meses de haber conquistado el ascenso a la máxima división.

Siempre se ha manifestado que la mentalidad de un deportista y un entrenador deben ir de la mano, para llegar a puerto seguro, independiente a la tarea diaria en el entrenamiento, la estrategia debe ser bien pensada pero sobretodo soportada por paciencia y billetes de una directiva. Es casi regla general en nuestro país que el equipo que recién arriba a la Primera Nacional inmediatamente descienda sin embargo que bueno que hay honrosas excepciones como los “Xolos”.

Sin embargo sería bueno, que ésta misión de éxito, la tomarán en cuenta los directivos del “Estudiantes” de Altamira y “Correcaminos” que a pesar de contar con más tiempo en el fútbol profesional tal parece que la lección no terminan de aprenderla; siguen jugando en la división de los “suspiros” –por aquello de ascender algún día- contratando jugadores y técnicos que de plano sólo vienen por los billetes y no comprometiéndose con el equipo, menos que les va a importar la afición, que si desea ver ese día en que su equipo juegue en la máxima división y ya no dispute amistosos o “copas”, “copitas” o “copotas” en donde se combinen algunos partidos con los de Primera que ni siquiera le dan la real importancia.

La familia De Hita lamentablemente le pone cariño, siguen invirtiendo pero…los resultados al final de cada torneo es el mismo: FRACASO, sería bueno intercambiar experiencia y métodos de crecimiento deportivo con quienes han logrado “ya algo” en nuestro fútbol; dudo mucho que sigan aguantando el mismo tren cuyos resultados incluyen un descenso; merecen ver coronado su titánico esfuerzo, pero deben abrir el abanico y no seguir casados con la ideología unamita, deben permitir rodearse de verdadera gente de fútbol y no de advenedizos que sólo cuidan su bolsillo, no valoran ni ayudan a crecer la franquicia de los “Estudiantes” de Altamira.

Por otro lado, los del “Correcaminos” tienen una deuda tan grande con su afición que cada inicio de torneo los “intereses” suben y suben, ya que la palabra a la que más le teme un deportista: FRACASO, los persigue cual su sombra, “perdieron” de locales el ascenso ante “Tigres”, ganan el año pasado con Nacho Rodríguez –como estratega- el torneo pero finalmente no ascienden, en pocas palabras eso no sirve; para colmo reciben la final de la pomposa Copa MX y la pierden, ahora el Chelís los abandona para ir tras el cántico de las sirenas y dirigir otra vez en Primera, mejor que se vaya a engañar a otro lado con su filosofía “Vende Espejitos”.

Nadie es tan sabio ni tan humilde como para no preguntar por el camino del éxito, ni tampoco debe hacer sentir menos a quienes busquen adoptar el sistema de quien lo ha alcanzado si el resultado puede ser igual. Se las dejo de tarea a los directivos de los “Estudiantes” de Altamira y “Correcaminos” si es que algún día desean convertirse en equipos de “Primera”, “Primera” o sólo desean seguir deambulando en la disque división de “plata”…………..ELLOS TIENEN LA PALABRA.

POR HOY ES TODO, HASTA LA PRÓXIMA, MIENTRAS TANTO HAGA DEPORTE QUE NADA LE CUESTA.