Correcaminos perdió en casa ante Dorados, disculpe si se lo recuerdo y le parece un trago amargo, como lo declarara Arturo Alvarado, pero de esto hay mucho que analizar.
En todo equipo quien dirige las acciones debe conocer a sus jugadores y conocerlos
bien.
No soy experta, mucho menos estratega, pero sí sé que para que las cosas funcionen bien debes saber combinar las cualidades que poseen los integrantes de un proyecto, para en conjunto armar un EQUIPO.

De nada sirve tener un buen plantel “armado para ascender”, si no saben combinarlos bien.
Hay jugadores que en el terreno de juego que no se llevan bien con otros y no hablo de que existan diferencias personales entre ellos, no, aunque las pueden tener, pero yo hablo de que las cualidades de cada uno se adaptan mejor a las de otro.

Como quien tiene la capacidad de desbordar hacia el frente y lo posesionan amarrado atrás, con elementos al frente que no bajan lo suficiente como para crear el enlace, o quien tiene rapidez combinado con quien no la tiene, imposible hacer jugadas o ver que la pelota fructifique si no combinas estas dos variantes.

Así que Joaquín Del Olmo debería analizar mejor los elementos con los que cuenta y armar un once que de acuerdo a sus potenciales resulte un equipo que proponga un buen fútbol desde los primeros minutos de cada partido, porque de que hay de donde, hay.

Y hasta en el fútbol, como en la ropa, hay que saberlo combinar.