Bien dicen que pasos mal aconsejados no te llevan nunca a un buen lugar.

Trillado es ya el tema de Alan Pulido y todo este asunto en donde no sabemos a ciencia cierta quién miente, si el joven futbolista o el Club Tigres.

¿Es su firma o no? ¿Tenía contrato todavía o no?

Alan Pulido es un futbolista joven con mucho talento, con un futuro prometedor; un victorense que dejó estas tierras buscando mejores oportunidades futbolísticas, porque claro está, nuestra querida Victoria no las ofrecía.

Pulido consiguió una de las oportunidades que muchos jóvenes quisieran tener, cuántos quisieran formar parte de Tigres o cualquier equipo del máximo circuito del futbol mexicano.

Además su labor fue reconocida y  se le tomó en cuenta para integrar la Selección Mexicana Sub 20 y de ahí a la Selección Mayor para ir al Mundial Brasil 2014, que si bien no tuvo  participación, si nos dio pinceladas del talento que posee.

A su regreso el muchacho quiso salir de México, para nuevamente buscar una mejor oportunidad. Y vino lo complicado, usted ya sabe todo lo que ha sucedido y posiblemente se encuentre en las mismas que yo: no sabemos si el malo es el Club que ha falsificado la firma de Pulido, o el joven que miente respecto a su contrato.

Lo cierto es que una de las dos partes no está diciendo la verdad. Y que ambas han actuado de una forma a mi parecer con poca madurez.

Podríamos  ponernos de parte de Alan y decir que el Club quiere obstaculizar los anhelos de superarse, pero, si te exigen presentarte a entrenar, que era lo primero que se le pedía, ¡Caray! Preséntate mientras se resuelve la situación, mientras logras una negociación, mientras se decide, si en verdad, sí tenías contrato o si tienes la razón a que no.

Alan, no estabas en el momento de tu carrera para protagonizar una historia de rebeldía, demandas, vacaciones y aferrarte a no entrenar.

No era el momento en tu vida, creo yo, de elegir pelear. Ibas agarrando vuelo, estabas apenas afinando tus movimientos, te lograste el reconocimiento de los aficionados al futbol por tu talento pues se vislumbraba un muchacho con cualidades a pulir.

Y te fuiste.

Tigres, un Club de gran tamaño, con grandes aspiraciones, tu no tenias porque aferrarte a complicarle la vida al joven que ya no quería ser parte de tus filas, para qué desgastar tiempo en una pelea que protagonizas en un momento en el que debes concentrarte en tu participación en la liga. ¿Porqué tanto empeño en alegar credibilidad y cumplimiento de contratos?, cuando sabemos se hacen muchos arreglos en el futbol cuando un futbolista quiere salir. Más bien me parece se aferran a ganar a como dé lugar. No ceden porque no quieren.

Algo así como si hubieran estado casados y esto fuera un divorcio en el que uno quiere ganarle al otro simplemente por mantener el orgullo. De esos divorcios interminables de abogados y audiencias con tal de “fregar” la otra parte.

No se usted, pero a mi esta situación me parece por demás una forma inmadura de actuar de ambas partes.  No le voy a ninguno.